martes, 8 de septiembre de 2015

Ayer desnudé tus deseos



Ayer desnudé tus deseos,
la única ropa,
tu piel,
te abrigué con mis brazos,
con mis labios,
te besé,
Cuanto más yo te miraba,
me causaba más placer.
Si vuelves a sentir frío,
yo te regalo mi piel,
pues es el único abrigo
que forma parte de mi ser,
a cambio solo te pido,
que no me dejes de querer.

Ricardo Martínez Moreno 6 de agosto de 2015
Derechos de autor reservados ©copyright