Cuando nacemos, ya lo hacemos llorando. Cuando se va un ser
querido volvemos a llorar. Al recibir una buena noticia, nos emocionamos y
volvemos a llorar. Si sentimos alguna emoción de algún acto familiar que se
produzca, otra vez a llorar.
Estoy meditando que al llorar
expresamos nuestros buenos y malos sentimientos, pero debemos de ir ensayando
porque hay muchos de ellos que los debemos convertir en risa.
Reír es sano, y llorar también. Ambas cosas son las que nos
demuestran que estamos vivos y que somos personas con sentimientos. Si solo reímos
algo falla, y a la inversa si solo lloramos, también. Así que debemos de pensar
que el llanto y la risa nos deben acompañar continuamente en nuestras vidas.
Si analizamos el mundo animal,
incluyéndonos nosotros, ellos tendrán sentimientos que como no los vemos reír
ni llorar, no los entendemos. Entonces riamos y lloremos ¡¡ somos personas ¡¡
Si nos paramos a pensar cuando y
porque hemos llorado o reído, nos daremos cuenta de que es todo lo que nos ha
acontecido desde el principio de nuestras vidas hasta hoy. Ambas expresiones
han estado y estarán siempre con nosotros.
! Riamos y lloremos !
Domingo 18 de abril de 2010
Ricardo Martínez Moreno